Gregorio Lozano Sánchez (Santa Olalla, 1927 - Vigo, 2017) ha sido un famoso matador de toros ejemplo castellano de torero sobrio de altísima dignidad profesional, profundo dominador, con intuición y conocimiento del oficio.
Nació en Santa Olalla el 8 de mayo de
1927, siendo bautizado en la iglesia de San Pedo Apóstol. Su infancia en Santa
Olalla no fue fácil, nacido en el seno de una familia muy humilde, tuvo once
hermanos de los que solo sobrevivieron cuatro. Vivió la posguerra siendo
todavía un niño y dicen que llegó a ser torero por culpa del hambre, haciendo
cierto el repetido refrán “más cornadas da el hambre”. Su padre Anselmo Lozano
fue fusilado el 8 de mayo de 1940, después de una larga estancia en la cárcel.[1]
Vistió su primer traje de luces el 16
de septiembre de 1947 en Cadalso de los Vidrios y después de un bagaje de
actuaciones por pueblos y más pueblos toreando desde las más infames capeas
hasta las novilladas más duras, con todo tipo de astados, debutó en Madrid el 8
de agosto de 1954 alternando tarde con Luis Díaz y Manolo Rivas. El 1 de abril
de 1956, domingo de Pascua, le dio la alternativa en Sevilla, Antonio
Bienvenida, con el mejicano Joselito Huerta de testigo y ejemplares de la
ganadería de Joaquín Buendía. En esa misma plaza de la Maestranza recibiría la
cornada más grave de su vida. El 14 de junio de ese mismo año confirma la
alternativa, con ganado de Antonio Pérez, de manos de César Girón y en
presencia de Alfonso Merino. Sus mejores años fueron sin duda, 1957 y 1958 en
los que toreo 73 y 87 corridas respectivamente.
Entre otros triunfos memorables en Las
Ventas, destaca el 19 de junio de 1960 en la corrida a beneficio del Montepío
de Toreros se encerró solo con los seis toros de Jesús Sánchez Cobaleda
“Barcial”, después de que no pudieran acompañarle los convalecientes Antonio
Bienvenida y Fermín Murillo. En solo una hora y veinte minutos corto siete
orejas, nadie ha cortado siete orejas en una sola tarde en Madrid. Andres
Travesi escribía en las páginas de ABC: “Solo una hora y veinte minutos duró
la lección que con tanta maestría explico el domingo Gregorio Sánchez. No hacia
falta más. Era también el tiempo justo, porque estaba hecho de faenas justas,
con los pases precisos para cada toro. En fin, una bonita lección a los
profesionales del toreo… Eran las siete y veinte de la tarde cuando
–despachando el sexto toro de Barcial- la gente decía: ¿Y ahora, adonde vamos
tan pronto? ¿Habrá entradas para el futbol?”[2] En
los mentideros taurinos alguno dijo que el matador había lidiado en tiempo
record para irse al Bernabeu a ver la final de copa entre el Real Madrid y el
Atletic de Bilbao, pero lo cierto es que el torero madridista de corazón tenía
una paliza en su cuerpo que difícilmente le permitiría ir al futbol.
Salió diez veces por la puerta grande
de Las Ventas, una como novillero y nueve como matador de toros.
Se retiró el 30 de septiembre de 1973,
en tarde desafortunada en Las Ventas, lidiando como único espada una dura corrida con toros de Manuel
García-Aleas. Después de 17 temporadas en activo, el desaparecido crítico
Vicente Zabala resumía su trayectoria con estas palabras: "Si en sus
comienzos se caracterizó por un toreo valiente y esforzado, se fue
transformando paulatinamente en un artista sobrio, eficaz y buen
lidiador".
Tras su retirada fue profesor y
director de la escuela de tauromaquia "Marcial Lalanda" de Madrid. Formado
a toreros como: Cristina Sánchez; Julián López “El Juli”, al que consideró su
“gran obra”; o a nuestro paisano, Carlos Collado, El Niño de la Taurina.
En 1960 es nombrado hijo predilecto de
Santa Olalla y la antigua calle Jardines es renombrada en su honor, en 1982 el
ayuntamiento de Santa Olalla coloca en la plaza Reyes de España un busto en su
honor "por haber difundido el nombre de Santa Olalla por las plazas de
toros de todo el mundo". En 2002 otro busto suyo se colocó en los
Jardines del Prado de Talavera. El 31 de mayo de 2003 la Junta de Comunidades
de Castilla-La Mancha le concedió la placa al mérito regional. En 2010 recibió
la Medalla de Oro de Santa Olalla. En 2016 se descubrió en Las Ventas un
azulejo que homenajeaba sus Puertas Grandes y su magisterio en la Escuela
Taurina.
Falleció en Vigo el 22 de junio de 2017
y al día siguiente el Ayuntamiento de Santa Olalla le rindió un último homenaje
junto a su monumento en la plaza Reyes de España de su pueblo natal.[3]
[1] MORALES GUTIERREZ, Juan Antonio: Santa Olalla a mitad de camino, (Santa
Olalla, 2003). Pág. 151.
[2] PÉREZ, Rosario: El maestro que pasó mucha hambre y se despachó seis toros en una hora y
veinte minutos. (ABC. 21 de noviembre de 2014).
[3]DOMINGUIN: Adiós a Gregorio Sánchez,
un torero de época de Santa Olalla. (La Tribuna de Toledo. Sábado, 24 de
junio de 2017.
Fotografía Coloreada de Gregorio Sánchez |
Postal de Gregorio Sánchez |
Fotografía de Gregorio Sánchez |
Primer boceto del busto de Gregorio Sánchez en Santa Olalla - Año 1964 |
Gregorio Sánchez y el escultor Emilio Laiz Campos ante el busto de Gregorio en el Sanatorio de toreros |
Busto a Gregorio Sánchez en los Jardines del Prado en Talavera dela Reina |