lunes, 2 de diciembre de 2024

Vitrina Cero - Báscula y tallímetro

Báscula y tallímetro

En la Colección etnográfica de Santa Olalla se conserva la última báscula y tallímetro que usó el Ayuntamiento de Santa Olalla para tallar a los quintos. Aquellos hombres que debían hacer el Servicio Militar Obligatorio, la Mili, para incorporarse temporalmente al ejército como soldados de reemplazo. Durante siglos y hasta el último sorteo, llevado a cabo en el año 2000, los quitos, jóvenes que cumplían su mayoría de edad, previamente a su incorporación debían tallarse, algo que solía hacerse en el Ayuntamiento. En el año 2022 se restauró y se incorporó este elemento a la colección.

Número de inventario: SO/57

Datación: Primera mitad del siglo XX

Contexto histórico: Edad Contemporánea

Materia: Metales y otros

Técnica: Industrial

Origen: Ayuntamiento de Santa Olalla

Bibliografía: Josué López Muñoz

domingo, 1 de diciembre de 2024

El Capitel de Los Guzmanes, pieza heráldica del siglo XV, ya está restaurado y expuesto en Santa Olalla

El Ayuntamiento de Santa Olalla ha celebrado su IX Jornada de Historia y Patrimonio de Santa Olalla y su Tierra, unas jornadas históricas y culturales de las más consolidadas y reputadas de la provincia, por la solvencia de los distintos ponentes que han sido invitados a ellas a lo largo de estos nueve años. Este 2024 el núcleo de la jornada era una interesante conferencia sobre Luis Tristán, coincidiendo con el IV Centenario de su muerte y la coincidencia de que una de sus grandes obras “La Inmaculada” esté en una de las iglesias de Santa Olalla. Por primera vez el ponente era un hijo del pueblo, Anastasio Gómez Hidalgo, doctor en derecho y ecónomo diocesano, el alcalde Pedro Congosto al finalizar su intervención le hizo entrega de unas Piedras del Portazgo en cerámica, un símbolo local que en su versión cerámica es entregado a los participantes en actos culturales.

La parte patrimonial de la jornada que dirige el concejal de cultura y también académico de la RABACHT, Josué López Muñoz, hizo balance del proyecto de difusión “Vitrina Cero” que pretende ir descubriendo, estudiando y difundiendo las distintas piezas históricas y arqueológicas que posee el Ayuntamiento de Santa Olalla.

Por último se inauguró, dentro de la Exposición Permanente, su última incorporación “El Capitel de Los Guzmanes” donado al Ayuntamiento por los vecinos José Pedro Hierro y Nuria Torres. Un impresionante capitel gótico, del siglo XV, de piedra caliza que contiene dos escudos heráldicos sustentados por cuatro ángeles tenantes. José Pedro explicó como el capitel llegó a ellos, a través de varias generaciones, Nuria Torres, su mujer, lo describió con enorme precisión, el restaurador Javier Peces explicó los trabajos de limpieza y consolidación que ha tenido que llevar a cabo para su correcta exposición, el alcalde agradeció lo que los donantes y otras familias están haciendo para lograr tener esta exposición permanente “nuestro museo” tan relevante y completa para la historia local, además de agradecer a la familia Gutiérrez del Cerro la donación de la moderna vitrina expositora de piedra. Y por último el concejal de cultura, Josué López, aseguró que el capitel perteneció a la Casa Fuerte de los Guzmán en esta villa, reflejándose en él las heráldicas de los señores de Santa Olalla Alvar Pérez de Guzmán fallecido en 1433 y doña Beatriz de Silva, entre ambos escudos la curiosa figura de un conejo que claramente se identifica como símbolo de fertilidad.









domingo, 24 de noviembre de 2024

La Inmaculada de Tristán de Santa Olalla

Inmaculada de Tristán
Iglesia de San Julián de Santa Olalla
Foto: David Blázquez

El lienzo de la Inmaculada Concepción conocido, en tiempos, con el sobrenombre de "Tota Pulchra Est"[1] es sin duda la obra de caballete más importante de cuantas se conservan en la iglesia de San Julián de Santa Olalla.[2]

Esta Inmaculada es obra de Luis Tristán (Toledo, 1585 - Ídem, 1624), uno de los discípulos oficiales de El Greco, considerado por muchos como el principal discípulo del pintor toledano por encima incluso de su propio hijo, Jorge Manuel Theotocópuli. El influjo de El Greco se manifiesta en determinados aspectos estilísticos e iconográficos de su obra, que se sitúa en la fase de transición entre el manierismo final y el barroco.

Posible autorretrato de Luis Tristan
Museo del Greco - Toledo

El estudioso de la obra del Greco y sus discípulos, Manuel Bartolomé Cossío dijo de Luis Tristán: "ha pasado este pintor, y todavía pasa en la opinión vulgar, por una especie de segundo Greco, y hasta, muchas veces, superior a éste mismo. Discípulo predilecto suyo, ejecutor, por recomendación del maestro, de aquellos encargos importantes, que éste no quería o no podía llevar a cabo”.[3]

Nuestra obra hay que fecharla en el primer cuarto del siglo XVII, muy posiblemente en torno al año 1621.[4] El primer documento en el que aparece es mucho más tardío, ya que no encontramos referencia alguna a esta pintura hasta un inventario de 1696.[5] Se trata de un inventario elaborado el 5 de octubre de 1696 durante la estancia en la parroquia de San Julián del visitador Pedro Gracián.

Coincide su ejecución con el voto que Santa Olalla hizo a la Inmaculada Concepción y que se firmó en la iglesia de San Julián el 2 de febrero de 1621.[6] Este voto se realizó en presencia de los Condes de Orgaz don Esteban Hurtado de Mendoza y Guzmán y doña Catalina de Rivera y Mendoza, juntó con el clero, justicias, regimiento y vecinos de Santa Olalla. También estuvo presente el tío del conde, don Francisco Hurtado de Mendoza y Ribera, en esos momentos Obispo de Pamplona.

Posible autorretrato de Luis Tristán
Museo del Prado - Madrid

Su ubicación original dentro de la iglesia de San Julián fue el pilar frente al pulpito, en ese lugar se encontraba en 1696 según el inventario y allí estuvo hasta 1995 momento en que se reorganizaron las pinturas de esta iglesia. Actualmente está en el bajo coro tras la pila bautismal.

Está elaborado en óleo sobre lienzo, mide 167 por 111 cm. y posé un marco barroco de época, de madera negra con apliques de relieves vegetales tallados y dorados.

La Virgen aparece de pie, en actitud orante, con la mirada hacia el cielo, coronada por estrellas, con el pelo suelto y ondulado sobre sus hombros, se apoya sobre una media luna. Su postura anatómica, que aparece resuelta en vertical con suaves ondulaciones en su perfil, debido a la sinuosidad del manto que la envuelve. En su túnica roja y manto azul, aparecen pliegues entre los cuales el artista ha dispuesto espacios en sombras que, contrapuestos a otros plenos de luz, señalan un intenso movimiento expresivo en su disposición corporal.

La imagen de la Virgen aparece rodeada de nubes que se abren de forma ovalada, dejando tras de la Inmaculada una luz dorada y celestial. Entre las nubes ángeles y multitud de querubines, todos dirigen su mirada a María en señal de adoración, los dos más grandes representados de media figura vestidos de rojo y verde, tienen sus alas desplegadas y sus manos en posición orante.

A sus pies un paisaje en el que se colocan con cierta verosimilitud numerosos atributos de las letanías. Estos elementos simbólicos son: la puerta, la escalera, la palmera, el árbol, el ciprés, el sol, la torre, la ciudad, el vellocino, el jardín, la fuente, la serpiente (no es un símbolo de las letanías, sino de la victoria sobre el pecado), el lirio, las rosas, las azucenas, el pozo, el espejo, la zarza en llamas, el barco (en forma de galera), la casa, el monte, el cedro y el templo.



 Ya en 1939 después de la Guerra Civil es catalogada como obra de Luis Tristán, pero su atribución definitiva fue confirmada en 1993 por Fernando Collar de Cáceres (profesor de la Universidad Autónoma de Madrid)[7] y en 2001 por Alfonso Emilio Pérez Sánchez (Ex director del Museo del Prado; Miembro de la Real Academia de la Historia; y miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando)[8].

En palabras de Fernando Collar de Cáceres: “En la iglesia de San Julián de la localidad toledana de Santa Olalla se conserva un notable lienzo de la Inmaculada, dotado de marco barroco y afectado de graves desgarros y burdas reintegraciones, que debe atribuirse sin reservas a Luis Tristán, a cuyo modelo del Museo de Bellas Artes de Sevilla responde por entero, con variaciones que en nada alteran el planteamiento general de la composición, y cuya particular factura y sentido del color exhibe en igual grado”.[9]

Existen otras versiones de Luis Tristán de nuestra obra, la más destacada en el Museo de Bellas Artes de Sevilla, las medidas de nuestro lienzo coinciden con las del lienzo sevillano, a nuestra obra se la considera posterior a la versión de Sevilla, a la que aventaja en el paisaje situado a los pies de la Virgen y en la colocación sobre él del enorme conjunto de elementos simbólicos que se representan. Una tercera pintura de la misma composición fue localizada hace tiempo en una colección de Cataluña y fue subastada en Madrid por la Casa de Subastas Ansorena el 28 de febrero de 2019[10], esta versión es más reducida y simplificada, el artista ha suprimido los ángeles que aparecen adorando a María, los símbolos marianos y ha simplificado el paisaje. Otras dos obras más se han localizado con este tema, aunque en este caso se trata de dos obras de taller: una para la iglesia de Santo Tomé de Toledo, de pequeño tamaño; y otra para el convento de carmelita de San José, también de la capital regional.

La calidad del paisaje de nuestro cuadro, superior a las demás representaciones, ha hecho pensar a algunos estudiosos en la posible participación en él de Manuel de Acebedo, pintor de origen portugués, experto paisajista y cuñado de Tristán al estar casado con la hermana menor de este Úrsula Tristán.

Tras su certificación como obra de Tristán, el lienzo fue restaurado entre 1994 y 1997 por el Instituto del Patrimonio Cultural de España[11] por las restauradoras María del Carmen Casas Ramos y Rocío Salas Almela. En 2005 participó en Toledo en la exposición “La Mujer vestida de Sol” organizada por el Arzobispado de Toledo y donde se reunieron numerosas piezas sobre la Inmaculada de las parroquias de la archidiócesis. En 2016 estuvo prestada al Museo del Greco que la expuso durante varios meses como su pieza invitada. Hecho que tuvo gran repercusión en la prensa provincial[12] así como la conferencia “El Greco, Tristán y la villa de Santa Olalla” que tuve la oportunidad de dar en el museo para despedir el préstamo de la pieza[13]. Coincidiendo con la conmemoración del IV Centenario de la muerte de Luis Tristán esta obra participó, en noviembre de 2024, en la exposición «Luis Tristán, excelente pintor de historias» en la localidad de Yepes (Toledo), exposición comisariada por Luis Alberto Pérez Velarde, conservador del Museo Sorolla de Madrid y anterior conservador del Museo del Greco de Toledo, organizada por el Ayuntamiento de Yepes y la Diputación Provincial de Toledo.

Inmaculada de Tristán
Antes de su restauración en 1997

No quiero despedir este capítulo sobre Tristán sin contar una anécdota del año 1613, que me ha llamado especialmente la atención pese a que cae dentro del campo de la leyenda. Esta anécdota sobre Tristán y El Greco nos la cuenta el pintor y tratadista de pintura Antonio Palomino:

“Estando en casa de su maestro se le ofreció a éste pintar un cuadro de la cena de Cristo Señor Nuestro para el refectorio del Convento de la Sisla, extramuros de la ciudad de Toledo, y los religiosos querían que fuese allí a pintarlo; y no pudiendo darles ese gusto, por hallarse ya muy anciano e impedido, les dijo que allí tenía un muchacho de toda su satisfacción que lo desempañaría muy bien y las daría todo el gusto. Aceptaron los religiosos y fue Luis Tristán y ejecutó dicho cuadro muy a satisfacción de toda la comunidad: pero llegando al precio, dijo que no lo podía dar por menos de doscientos ducados; los religiosos se escandalizaron y acudieron al maestro para que mediase. Él hizo que buscasen un coche para ir allá, como con efecto fue, y habiendo visto el cuadro comenzó a dar palos a Tristán con la muleta, diciendo que era un pícaro, deshora de los pintores, que como había pedido doscientos ducados por aquella pintura, que bien se conocía su poco talento, que la enrollase y se la llevase a Toledo; pues no la habría de dejar aunque le diesen quinientos ducados por ella. Los religiosos, que al principios entendieron le reñía por lo mucho que había pedido, se quedaron yertos cuando oyeron el final de la cuestión, y después de muchos debates, le hubieron de dar lo que quiso; cierto que es un excelentísimo cuadro”.[14]



[1] Fue catalogada con este nombre en la exposición “La Mujer vestida de Sol” organizada por el Arzobispado de Toledo en 2005.

[2] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: El Greco y Santa Olalla, (Ediciones Andante. Santa Olalla, 2014). Pág. 40.

[3] COSSÍO, Manuel Bartolomé: El Greco. (Madrid, 1980). Pág. 242.

[4] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Retazos Eulalienses, una selección de artículos del Blog Eulaliense sobre la villa de Santa Olalla. (Eulaliense. Graficas Lagomar. Santa Olalla, 2023). Pág. 185.

[5] ARCHIVO PARROQUIAL DE SANTA OLALLA: Libro 2º de fábrica de la Parroquia de San Julián, 14/APSO; (de 1662 a 1730).

[6] ARCHIVO MUNICIPAL DE SANTA OLALLA: Voto de Santa Olalla a la Inmaculada Concepción; SO 106/18 (1621).

[7] COLLAR DE CACERES, Fernando: Aportaciones a la obra de Luis Tristán. (Anuario del Departamento de Historia y Arte, Universidad Autónoma de Madrid. Madrid, 1993). Págs. 105 -110.

[8] PÉREZ SÁNCHEZ, Alfonso Emilio y NAVARRETE PRIETO, Benito: Luis Tristán. (Fundación Toledo-BBVA. Madrid, 2001). Pág. 208. En el Catalogo de obras de Luis Tristán que elabora el autor, aparece con el número 40.

[9] COLLAR DE CACERES, Fernando: Aportaciones a la obra de Luis Tristán. (Anuario del Departamento de Historia y Arte, Universidad Autónoma de Madrid. Madrid, 1993). Pág. 106.

[10] Ansorena: Catalogo de la Subasta 391, (Madrid, 28 de febrero y 1 de marzo de 2019). Lote 84. Pág. 36.

[11] Instituto del Patrimonio Cultural de España: Informe de restauración de la "Inmaculada" de Luis Tristán, procedente de la parroquia de Santa Olalla (Toledo). Sig. BM 205/20; Sig. digital R02463T y R02463F. (Dirección General de Bellas Artes. Madrid, 1997).

[12] La Tribuna de Toledo: Santa Olalla expone su Tristán en el Museo del Greco. (Toledo, 8 de marzo de 2016).

[13] ABC: Santa Olalla, El Greco y Tristán, (Toledo, 12 de mayo de 2016). II. La Tribuna de Toledo: El Griego lengua de unión con Santa Olalla, (Toledo, 12 de mayo de 2016).

[14] PALOMINO Y VELASCO, Antonio: El museo pictórico y escala óptica con el parnaso español pintoresco laureado. Madrid, 1715-1724. (Ed. Aguilar; Madrid, 1947).  Pág. 866. Cita tomada de PÉREZ SÁNCHEZ, Alfonso Emilio y NAVARRETE PRIETO, Benito: Luis Tristán. (Fundación Toledo-BBVA. Madrid, 2001). Pág. 25.

Inmaculada de Tristán
Museo de Bellas Artes de Sevilla


Inmaculada de Tristán
Colección particular toledana
Foto: David Blázquez

Inmaculada del Taller de Tristán
Parroquia de Santo Tomé - Toledo

Inmaculada del Taller de Tristan, con su marco
Parroquia de Santo Tomé - Toledo

miércoles, 20 de noviembre de 2024

Otra Inmaculada de Tristán - Icónica belleza en un paisaje simplificado

 

Inmaculada de Tristán
Colección particular toledana
Foto: David Blázquez

Conocida la magnífica Inmaculada de Luis Tristán de la Iglesia de San Julián de Santa Olalla, fechada en torno a 1621, y la Inmaculada de Luis Tristán del Museo de Bellas Artes de Sevilla, este modelo se debió repetir en otras ocasiones. Ambos lienzos coinciden en medidas, coinciden en la disposición de la imagen de la Virgen y en su representación sobre una gloria de ángeles de similares características, algo más completa la de Santa Olalla como también lo es su magnífico paisaje.[1]

Siguiendo este modelo encontramos una tercera pintura de la Inmaculada de Luis Tristán, una versión de tamaño más reducido 100 por 74 cm. frente a los 167 por 111 cm. de las primeras versiones.

El artista toledano hace en este óleo sobre lienzo una versión más reducida y simplificada, si bien mantiene la calidad y disposición de la imagen de la Virgen que aparece de pie, en actitud orante, con la mirada hacia el cielo, coronada por estrellas, con el pelo suelto y ondulado sobre sus hombros, se apoya sobre una media luna y esta vestida de azul y granate. Suprime la gloria de ángeles adoradores que sustituye por un cielo de oscuras nubes que se abre en forma de aureola ovalada, dejando pasar la luz dorada del sol y sus rayos tras la imagen de la Inmaculada. El paisaje a los pies de la Virgen también se simplifica, en un horizonte con árboles a los lados solo encontramos el espejo, los lirios y las rosas.


El catedrático emérito de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla, Enrique Valdivielso González informó, el 20 de abril de 2017, sobre la autenticidad de esta obra como producción del Luis Tristán. Decía en su informe: «Un atento examen de esta obra evidencia que es una réplica realizada por el propio artista, del original que se conserva en el Museo de Bellas Artes de Sevilla. Esta replica es más reducida y en ella el artista ha suprimido los ángeles que aparecen adorando a María en la parte superior, y también ha simplificado el paisaje del fondo, eliminando los diferentes símbolos Marianos de los que solo ha dejado los lirios y las rosas.

Los aspectos compositivos, dibujísticos y cromáticos de esta Inmaculada, muestran en ella una captación idéntica a la obra del Museo de Sevilla, tanto en la expresión de su porte y la exacta tipología en la disposición de sus manos. Repite igualmente su postura anatómica, que aparece resuelta en vertical con suaves ondulaciones en su perfil, debido a la sinuosidad del manto que la envuelve. Su túnica roja repite puntualmente cada uno de sus pliegues, entre los cuales el artista ha dispuesto espacios en sombras que, contrapuestos a otros plenos de luz, señalan un intenso movimiento expresivo en su disposición corporal. Como fondo, Tristán ha dispuesto un enorme espacio cubierto con oscuras nubes en los laterales, que dan paso a un amplio golpe central de luz dorada y que otorga una resplandeciente aureola a la figura de María.

Es esta una obra que puede fecharse en torno a 1615-1620 en unos momentos en que el artista alcanzó su máximo nivel de creatividad, y por ello se le acumularon los encargos que hubo de resolver, como era habitual en aquella época, con la ayuda de su obrador. Concretamente, el modelo de esta Inmaculada debió de tener un enorme éxito entre la clientela toledana, lo que motivó que se le encomendasen numerosas repeticiones de la misma, casi todas ellas destinadas a la devoción privada en oratorios de domicilios particulares.

Otras Inmaculadas de Tristán que siguen el modelo original se encuentran en la parroquia de San Julián en Santa Olalla (Toledo), y en la parroquia de Santo Tomé, en la propia ciudad de Toledo, aunque esta muestra una calidad muy inferior a las anteriores comentadas.

Sevilla, a 20 de abril de 2017».[2]

La Inmaculada conserva su marco original de moldura de madera dorada.

Inmaculada de Tristán con su marco dorado

Esta Inmaculada desde el siglo XX ha estado localizada en una colección particular catalana, hasta que fue subastada en Madrid en dos ocasiones en 2019 y en 2021, pasando en la actualidad a formar parte de una colección particular toledana.

Esta Inmaculada fue restaurada en 2023 por José Javier Peces Ochovo, Graduado en Conservación y Restauración por la Escuela Superior de Arte y Diseño de Andalucía (ESADA) de Granada, que emitió informe de intervención, restauración y conservación.

Inmaculada de Tristán
Estado previo a la restauración de 2023

Coincidiendo con la conmemoración del IV Centenario de la muerte de Luis Tristán esta obra participó, en noviembre de 2024, en la exposición «Luis Tristán, excelente pintor de historias» en la localidad de Yepes (Toledo), exposición comisariada por Luis Alberto Pérez Velarde, conservador del Museo Sorolla de Madrid y anterior conservador del Museo del Greco de Toledo, organizada por el Ayuntamiento de Yepes y la Diputación Provincial de Toledo.



[1] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Retazos Eulalienses, una selección de artículos del Blog Eulaliense sobre la villa de Santa Olalla. (Eulaliense. Graficas Lagomar. Santa Olalla, 2023). Pág. 185.

[2] Ansorena: Catalogo de la Subasta 391, (Madrid, 28 de febrero y 1 de marzo de 2019). Lote 84. Pág. 36.

martes, 19 de noviembre de 2024

Tristán, excelente pintor de historias (Vídeo-reportaje)

Comparto este vídeo con un reportaje de La 1 de Televisión Española sobre la exposición celebrada en Yepes (Toledo), sobre el pintor Luis Tristán (Toledo, h. 1585-1624) «Tristán, excelente pintor de historias». Exposición comisariada por el conservador del estado, Luis Alberto Pérez Velarde.

En esta exposición, que conmemora el IV Centenario de la muerte del pintor toledano, ha participado el lienzo de la Inmaculada de Tristán de la Parroquia de San Julián de Santa Olalla, que por primera vez se expone junto a otra versión de la misma Inmaculada pero de un tamaño inferior, estableciendo un dialogo inédito para nuestra obra.

 

domingo, 10 de noviembre de 2024

Santa Olalla presente en el IV Centenario de Tristán


 El vínculo de Santa Olalla con el destacado pintor del Siglo de Oro Luis Tristán, que dejó en 1620 una de sus mejores obras en nuestro pueblo, ha condicionado que Santa Olalla esté participando en la celebración del IV Centenario de su muerte.

El sábado 9 de noviembre de 2024 se inauguró en el Antiguo Hospital de San Nicolás de Yepes una importante exposición: “Tristán, excelente pintor de historias”, que permanecerá hasta el 1 de diciembre.

A la inauguración asistieron en representación de Santa Olalla, como pueblo prestador de su magnífica Inmaculada, el concejal de Cultura y Patrimonio Josué López Muñoz y la concejala Vanesa Robles Peña. Participarón en el acto que había organizado el alcalde de Yepes y diputado provincial de Cultura, Tomas Arribas, junto a otros diputados provinciales y nacionales.

Nuestra Inmaculada, que está sorprendiendo a los visitantes por su calidad y la variedad iconográfica de su paisaje, se expone junto a otra versión de la misma Inmaculada pero de un tamaño inferior, estableciendo un dialogo inédito para nuestra obra. 

Se está organizando una excursión desde Santa Olalla para poder visitar la exposición y el municipio monumental de Yepes, en cuya colegiata se guarda un retablo completo con pinturas de Tristán.

Preparación de la obra para su transporte

Caja de madera a medida para el transporte de la obra