jueves, 5 de junio de 2025

Vitrina Cero - Puntas de flecha paleolíticas


Puntas de flecha paleolíticas

Cuatro puntas de flecha foliáceas elaboradas a partir de cantos rodados de cuarzo y con acabado tosco. Perteneciente a las industrias líticas del paleolítico. Herramientas líticas prehistóricas. Se trata de piedras de gran dureza, talladas por ambas caras hasta conseguir una forma triangular, con bordes sinuosos a lo largo del contorno.

Número de inventario: SO/43/A

Datación: Paleolítico

Contexto histórico: Pre-historia

Materia: Piedra

Técnica: Tallado y pulido

Origen: Colección González-Castrejón

Bibliografía: Josué López Muñoz y Francisco Javier de Fuentes Fernández http://ceres.mcu


 

domingo, 25 de mayo de 2025

Carraca de San Julián, un instrumento propio de la Semana Santa

 

Un elemento curioso, de los muchos que guarda la iglesia de San Julián de Santa Olalla, es una carraca de madera que se utilizaba antiguamente durante la Semana Santa.

En los días de Semana Santa en los que no se pueden tocar las campanas, durante el Jueves Santo, Viernes Santo y Sábado Santo hasta la Vigilia Pascual, en señal de duelo por la muerte de Jesús, se hacían sonar por las calles carracas o matracas para avisar de los oficios religiosos y de las procesiones. En otros lugares de España también en el ámbito de la Semana Santa, algunas cofradías penitenciales hacen sonar carracas durante su desfile procesional, y en otros se usa para simular un terremoto durante el Oficio de Tinieblas.

Se trata simplemente de una caja de madera, con una manivela que al hacerla girar mueve dos piñones que golpean a dos lengüetas o tablillas, produciendo un sonido estruendoso.

Una variante de la carraca es la matraca; instrumento de madera compuesto por un tablero y un par de aldabas, que al sacudirlo, produce un ruido desapacible; por lo repetitivo e incluso molesto de su sonido nació el dicho de «dar la matraca».

La carraca que conserva la iglesia de San Julián de Santa Olalla fue recuperada en el año 2012 por la Cofradía de Jesús Nazareno de Medinaceli y expuesta en su vitrina.[1]



[1] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: La Capilla de Jesús de Medinaceli en San Julián, (Cofradía de Jesús Nazareno de Medinaceli de Santa Olalla. Santa Olalla, 2012). Pág. 27.

sábado, 24 de mayo de 2025

Sea la luz; y fue la luz - Una pintura nueva para el retablo de «los San Julianes»

 

Siempre hemos conocido el retablo mayor de la iglesia de San Julián, conocido popularmente como el retablo de los “San Julianes”,[1] incompleto, faltándole la pintura central del banco del retablo.

En sus orígenes este espacio lo ocupaba una sencilla pintura de temática eucarística. Se trataba de una tabla pintada al óleo en la que encontrábamos un sol flanqueado por dos árboles y otra vegetación. Esta tabla decorativa hay que fecharla en el momento de la construcción del retablo por Juan Gómez Lobo en 1676.[2]

Conocemos esta pieza gracias a una fotografía de 1936 de la Biblioteca Nacional, realizada tras los destrozos de la Guerra Civil.[3]

Desgraciadamente esta pintura no se ha conservado y su falta fue cubierta por un tapizado de damasco rojo que servía de fondo al templete o manifestador eucarístico.

Poco antes de la Semana Santa de 2025 esta carencia fue subsanada con una nueva pintura. Un óleo sobre lienzo realizado por el pintor, afincado en Santa Olalla, José Sánchez Castro, cuyas obras son de reconocido prestigio en el ámbito nacional, es una importante obra el siglo XXI que se pretende incorporar a un retablo antiguo como aportación de las generaciones actuales al arte sacro y al patrimonio de la iglesia de San Julián de Santa Olalla.

La obra representa un paisaje agreste en el que, en un cielo entre tinieblas, se abre paso la luz. Escena que hace referencia al libro del Génesis y a la creación del mundo, «Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz» (Génesis 1.3). Pero que también es apropiada para servir de fondo a la imagen de un crucificado como es el caso en el retablo de Santa Olalla.

 



[1] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Retablo Mayor de los San Julianes de Santa Olalla. Dentro del libro colectivo Retablos en la comarca de Torrijos. (Instituto de Estudios Comarcales Señoríos de Entre-Ríos. Torrijos, 2013). Pág. 79-86.

[2] Archivo Diocesano de Toledo: Pleito con el cura sobre el pago del construido retablo de la iglesia parroquial de San Julián. Reparación de templos - Caja 53 – Expte. 2.

[3] Biblioteca Nacional de España: Iglesias e imágenes religiosas destruidas (Toledo) [Material gráfico]

(España Delegación del Estado para Prensa y Propaganda. Fondo fotográfico de la Guerra Civil Española. 1936-1939). Signatura: 796272455.

miércoles, 14 de mayo de 2025

Vitrina Cero - Capitel de los Guzmanes


Capitel de los Guzmanes

Capitel gótico tallado en piedra caliza. Con decoracion heráldica que contiene el escudo de los Guzmán y el de los Silva con sus correspondientes filacterias, están sustentados por cuatro ángeles tenantes que visten largas túnicas. En uno de los laterales aparece representado un conejo, al tratarse de un capitel heráldico de linaje donde encontramos los escudos de los miembros de un matrimonio este símbolo se interpreta como símbolo de fertilidad y prolificidad.

Restaurado por el Ayuntamiento de Santa Olalla en 2024.

Número de inventario: SO/58

Datación: Siglos XV

Contexto histórico: Etapa medieval

Materia: Piedra caliza

Técnica: Tallado

Origen: Donación familia Hierro-Torres

Bibliografía: Josué López Muñoz

domingo, 6 de abril de 2025

Privilegio Rodado del Portazgo de Santa Olalla

 

La exposición “El archivo del Conde de Orgaz - Una ventana a la historia”[1] que recientemente ha acogido la Biblioteca Nacional ha sacado a la luz algunos documentos de la colección y archivo de los Condes de Orgaz importantes para la historiografía local de Santa Olalla.

Se trata de un fondo documental de carácter familiar y nobiliario, cuya importancia se extiende a las investigaciones de los lugares vinculados a la administración de su patrimonio vinculado. La conservación, catalogación, estudio y difusión de este archivo histórico fue una de las mayores contribuciones culturales de don Gonzalo Crespí de Valldaura y Bosch-Labrús (1936-2022), XX conde de Orgaz, XVIII conde de Castrillo, XIII conde Sumacárcer, grande de España y bailío de la Orden de Malta. Verdadero mecenas en lo cultural, fue patrono fundador de la Fundación de Amigos de la Biblioteca Nacional de España (FABNE) y su presidente desde 2017 hasta su fallecimiento en 2022, así como vocal del Real Patronato de la Biblioteca Nacional de España. Doctor en Historia, fue académico correspondiente de la Real Academia de la Historia y de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo y presidente de la Asociación Internacional de Bibliofilia. Empresario y publicista, desarrolló una importante labor social como fundador y presidente ejecutivo de la ONG Ayuda en Acción y presidente de la Asamblea Española de la Orden de Malta.

De entre los fondos documentales expuestos que conciernen a Santa Olalla destaca muy especialmente un pergamino que es un Privilegio Rodado de Pedro I “el Cruel”, por el que concede a Martín Fernández de Toledo, el Portazgo de Santa Olalla, con diversas rentas que correspondían al dicho portazgo y la facultad de poder hacer mayorazgo del mismo. Esta firmado en Sevilla el 20 de julio de 1350.[2] Curiosamente al final de este artículo descubriremos que se trata de un Privilegio Rodado manipulado, en el que se modificó el Privilegio del Portazgo de Madrid para hacerlo pasar por el Privilegio del Portazgo de Santa Olalla.

Un Privilegio Rodado es un tipo de documento oficial muy característico de la administración de los reyes de Castilla durante la Edad Media. Es una escritura real solemne, escrita en pergamino, por la que se conceden ciertos derechos, exenciones o favores a personas, instituciones o localidades. El nombre "rodado" viene del gran sello circular, en forma de “rueda”, que aparece en el documento, en su interior están las armas del rey, el escudo de Castilla y León, y su nombre.

Además, en este documento, como es habitual, encontramos que la letra capital inicial está precedida de un crismón, anagrama con el nombre de Cristo y otros símbolos religiosos, ambos están iluminados. El texto está escrito en letra gótica, con algunas palabras resaltadas en tinta roja o azul, destacando nombres reales. En la parte inferior hay agujeros para pasar los cordones del sello, del que pendía el sello real en plomo.

Esta concesión del Portazgo de Santa Olalla a Martín Fernández de Toledo (1323-1355)[3], V Señor de Orgaz, supondría, de ser cierta, el primer derecho que en el Señorío de Santa Olalla van a tener los Señores de Orgaz.

Esta concesión suponía poder cobrar todos los impuestos de las mercancías que entraban y salían de la villa[4], y también incluye una serie de propiedades, como las huertas Daluega, la tienda de harina, las tablas de las carnicerías, cordoneros, alatares y buñoleros. También le concede el derecho de hacer prender a los descaminados que intentasen librarse del pago del portazgo. Todo ello se concede por juro de heredad con la posibilidad de constituirlo en mayorazgo, con las prohibiciones habituales de poder disponer de ello a favor de la Iglesia, hombre de religión o personas de fuera del señorío del rey. En realidad la villa de Santa Olalla contaba de antiguo con el derecho de portazgo, encontrándose regulado ya en la concesión del Fuero de Toledo a Santa Olalla por el rey Alfonso VII en 1124.[5]

Pese a que existen algunas dudas de si don Martín Fernández de Toledo poseyó el Señorío de Santa Olalla[6], sería más adelante cuando el Señorío de Santa Olalla se unió al Señorío de Orgaz gracias al matrimonio de su nieto Martín Fernández de Guzmán (1358-1377)[7], VII Señor de Orgaz, con María de Orozco y Meneses “la Mal Lograda”, que poseía el Señorío de Santa Olalla por herencia de su padre don Iñigo López de Orozco. Desde esta fecha ambos señoríos permanecerían unidos hasta la desaparición de los señoríos en el siglo XIX.

Una curiosa aportación nos hace en 2020 el conde de Orgaz don Gonzalo Crespí de Valldaura y Bosch-Labrús, que nos alerta de la falsificación contenida en este documento.[8]  «Es importante señalar que las dos veces que aparece mencionado Santa Olalla en este documento el nombre ha sido sobrescrito sobre otro nombre borrado. Se trata, sin duda, de un documento manipulado, probablemente en fecha bastante posterior. Gracias a otro privilegio rodado de 1351[9] que confirmaba esta concesión sabemos que el documento original se refería al portazgo de Madrid. También hay un traslado en el Archivo de la Villa de Madrid de este mismo documento por el que Pedro I concede a Martín Fernández este portazgo sobre Madrid y no sobre Santa Olalla.[10] Esta manipulación del documento pudo ocurrir en fecha tan tardía como los primeros años del siglo XVI cuando el señor de Orgaz y Santa Olalla se vio llevado a pleito por la Mesta y por la ciudad de Toledo en 1510[11], y debió encontrar un soporte documental de lo que, a todas luces, constituía un abuso de su poder. La manipulación es muy grosera dado que las tiendas y el lugar mencionado “huertas Daluega”[12] no podían encontrarse en Santa Olalla que pese a ser un lugar de una cierta importancia por estar situado en la principal ruta hacia Extremadura desde Toledo y Madrid, no parecía probable que pudiese tener una gran diversidad de tiendas».



[2] Archivo de los Condes de Orgaz: Privilegio Rodado del rey Pedro I a Martín Fernández, concediéndole el Portazgo de Santa Olalla con diversas rentas que correspondían al dicho portazgo y la facultad de poder hacer mayorazgo del mismo, 1350-07-20, Sevilla. Signatura: Orgaz y Santa Olalla, Leg. XI, n° 14.

[3] GÓMEZ FERNÁNDEZ-CABRERA, Jesús: Señores y Condes de Orgaz, apuntes biográficos y documentales. (Editorial Círculo Rojo. Almería, 2021). Tomo 1; pág. 107.

[4] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Retazos Eulalienses, una selección de artículos del Blog Eulaliense sobre la villa de Santa Olalla. (Eulaliense. Graficas Lagomar. Santa Olalla, 2023). Pág. 249.

[5] Archivo Municipal de Santa Olalla: Privilegio Real de Concesión del Fuero de Toledo a la Villa de Santa Olalla. Signatura: SO/106/1.

[6] MOLÉNAT, J. P.: Campagnes et Monts de Tolède du XIIe au XVe siècle. (Casa de Velázquez. Madrid, 1997). Pág. 385.

[7] GÓMEZ FERNÁNDEZ-CABRERA, Jesús: Señores y Condes de Orgaz, apuntes biográficos y documentales. (Editorial Círculo Rojo. Almería, 2021). Tomo 1; pág. 171.

[8] Crespí de Valldaura y Bosch-Labrús, Gonzalo: Los Señores de Orgaz (1220-1520). (Editorial Círculo Rojo. Almería, 2020). Pág. 135.

[9] Archivo de los Condes de Orgaz: Privilegio Rodado del rey Pedro I a Martín Fernández, confirmado la concesión del Portazgo de Madrid, 1351-11-10. Signatura: Orgaz y Santa Olalla, Leg. V, n° 47.

[10] Archivo de la Villa de Madrid: Traslado del Privilegio de Pedro I concediendo el Portazgo de Madrid, 10 de julio de 1350. Signatura: Secc. 39, Leg. 406, n° 54.

[11] Archivo de los Condes de Orgaz: Compulsa de pleito, siglo XVI. Signatura: Leg. XVII, n° 8.

[12] Topónimo perdido, no podemos saber con certeza que se refiera a Madrid aunque todo parece indicar que no se refiere a Santa Olalla ni su entorno cercano.

viernes, 4 de abril de 2025

Retrato de dos hermanos de la Colección de los Condes de Orgaz

Retrato de dos hermanos disfrazados
Colección de los Condes de Orgaz

En la exposición “El archivo del Conde de Orgaz - Una ventana a la historia” que recientemente ha acogido la Biblioteca Nacional, los fondos documentales se completaban con una selección de cuadros de los Colección de los Condes de Orgaz.

Entre todos destacaba por lo singular de su temática un retrato de dos hermanos disfrazados, uno de caballero y su hermano pequeño de franciscano, evocando las dos grandes vocaciones de la nobleza española en la España de los Austrias. 

Se trata de un cuadro de la Escuela madrileña, del primer tercio del siglo XVII. El modelo seguido por el artista es el del conocido cuadro de Sánchez Coello retratando a las hijas de Felipe II, que se conserva en el Museo del Prado. En el dorso lleva una inscripción: «DEL PANTOJA», como una pretendida atribución al pintor Juan Pantoja de la Cruz.

El niño de la izquierda viste cortesano con una chaqueta ricamente adornada con bordados dorados, puños con encaje y un cuello de lechuguilla, característico de la nobleza del siglo XVII. Su postura es elegante, con una mano sosteniendo un sombrero y la otra extendida hacia su hermano.

El niño de la derecha viste un hábito franciscano con un cordón anudado en la cintura, representa el ideal de vida religiosa. 

La escena se desarrolla en un espacio interior con un paisaje apenas visible a la derecha, un fondo sobrio y con escasa iluminación lo que resalta los rostros y las vestimentas. 

El cuadro tiene un fuerte simbolismo sobre el destino de los dos hermanos, mostrando el contraste entre la vida militar y cortesana y la vida religiosa, vocaciones comunes en las familias nobles de la época.

Santa Teresa de Jesús en su estudio
Colección de los Condes de Orgaz



miércoles, 2 de abril de 2025

Vitrina Cero - Fíbula de puente o arco visigoda


Fíbula de puente o arco visigoda

Fíbula de arco o puente. Muestra cabecera semicircular con cinco apéndices y pie prolongado acabado en punta con seis apéndices. Bronce fundido. La superficie está decorada a base círculos con un punto inscrito, motivos que aparecen distribuidos a lo largo de la cabecera, el pie y los apéndices. En el reverso, el sistema de sujeción consistiría en una charnela y un resorte de hierro con la aguja. La función de una fíbula es la sujeción de prendas de vestir, como por ejemplo servir de cierre en una capa.

Número de inventario: SO/51

Datación: Siglo VI

Contexto histórico: Etapa visigoda

Materia: Bronce

Técnica: Fundido

Origen: Colección González-Castrejón

Bibliografía: Josué López Muñoz y Francisco Javier de Fuentes Fernández http://ceres.mcu

miércoles, 5 de marzo de 2025

Recortes de prensa de la Cofradía de Jesús de Medinaceli de Santa Olalla

ABC - 2005


En 2005 recibí una llamada que me puso en marcha para participar en un grupo que iba a crear una nueva Cofradía en Santa Olalla, la de Jesús Nazareno de Medinaceli, que relanzaría la Semana Santa Eulaliense.
Hoy han pasado 20 años para esta Cofradía, y para todos nosotros, para hacer un poco de memoria os voy a dejar una selección de recortes de prensa de la época en la que yo estuve en la directiva. La mayoría de estos artículos en prensa están firmados por mí.


El Eco - 2005

La Voz de la Sagra - 2006

ABC - 2007

El Zoco - 2007

El Eco - 2008

El Zoco - 2008

El Zoco - 2010

ABC - 2012

ABC - 2013

La Tribuna de Talavera - 2013

El Zoco - 2013

lunes, 3 de marzo de 2025

Vitrina Cero - Fíbula romana


Fíbula romana

Fíbula de pie vuelto. Puente peraltado de forma semiesférica; pie largo, que se dobla en curva tocando el puente en su parte superior. Resorte bilateral de cuerda interior arrollado en torno a un eje. De bronce fundido. Aguja del mismo material.

Número de inventario: SO/44/B

Datación: Siglo I-II

Contexto histórico: Etapa romana

Materia: Bronce

Técnica: Fundido

Origen: Colección González-Castrejón

Bibliografía: Josué López Muñoz y Francisco Javier de Fuentes Fernández http://ceres.mcu

domingo, 2 de marzo de 2025

Un trabajo monjil de 1904: San Antonio de Padua

Las monjas que durante algunas décadas estuvieron ayudando en la Parroquia de Santa Olalla y que tenían su casa, capilla y guardería en la calle Prolongación de San Juan, nos dejaron un curioso cuadro de gran tamaño que es una singular muestra de trabajo monjil.

Se trata de un cuadro de gran tamaño en el que está enmarcada una seda sobre la que hay bordadas unas composiciones de flores de colores, en el centro una estampa de papel impreso y recortado de San Antonio de Padua con el Niño, figuras que aparecen vestidas con sedas plegadas y pegadas.

En la parte baja podemos leer un texto pintado con una elegante caligrafía: «Celia Esquiroz en el Colegio de las Hijas de la Cruz – Tafalla - 1904». Este texto nos aporta la fecha de la obra y el nombre de su autora que entendemos que se trata de una alumna o una monja del Colegio San José que desde el año 1888 las Hijas de la Cruz tenían en Tafalla (Navarra).

Lo que desconocemos es el motivo por el que esta curiosa obra ha terminado en Santa Olalla, quizás la autora era familiar de alguna de las monjas que estuvo en Santa Olalla, ya que este tipo de composiciones eran habitualmente regalos que hacían para sus familiares.