Dentro de la obra del poeta eulaliense Alonso Palomino[1]
(Santa Olalla, 1573 – Mentrida, 1637), destacan sus siete composiciones para la
justa en honor a Santa Teresa de Jesús en 1614.[2]
Que fueron publicadas por fray Diego de San José en su "Compendio de las Solemnes Fiestas que en toda España se hicieron
en la Beatificación de N.B.M. Teresa de Jesús fundadora de la reformación de
descalzos y descalzas de N. S. del Carmen"[3]
impreso en Madrid en el año 1615.[4]
Además de en esta justa, Alonso Palomino había participado
anteriormente en otras como las justas al nacimiento de Felipe IV, en 1604; al
Santísimo Sacramento en San Nicolás, en el año 1608; y a San Ignacio en el
Colegio de los Jesuitas, en 1609. Fue también autor de versos preliminares y
encomiásticos en libros de amigos como el de Eugenio Robles, capellán de la
catedral, "Compendio de la vida y
hazañas del cardenal don fray Francisco Ximénez de Cisneros" impreso
en Toledo en 1604.[5]
Canción
de Alonso Palomino sobre el verso segundo de los Cantares, que dice: «Veni Columba mea, sponsa mea, amica mea, a
nuestra Santa Madre Teresa de Jesús».
La
enamorada palomilla hermosa
más
del amor que de la flecha herida
tiernos
arrullos con lealtad derrama,
no
siente el despedirse de la vida,
que
no es la vida con lo que más reposa,
quien
en llamas de amor, de amor se inflama
a
su consorte con gemidos llama,
y
en la cavada piedra
como
a su olmo hiedra
verse
con él desea en nido, o rama,
mas
faltándole ya el vital aliento
su
espíritu abrasado
halla
en solo su amado elemento.
La
tierna esposa, a quien el rico amante
hermoso
Adonis, abrasado y tierno
joyas
trajo de Oriente soberanas
el
que a la escarcha helada del invierno
y
a sus rigores hecho de diamante,
hablaba
por cancelas y ventanas,
ya
con tiernas entrañas más humanas
por
el suspira y llora
y
a la región que mora
tiende
los ojos noches y mañanas
y
ansiosa por hallarse en su presencia
y
gozar sus favores
muere
de amores (lánguida dolencia).
Levantase
del Líbano florido
la
amiga del pastor enamorado,
por
verse de sus manos coronada:
dilatase
el contento deseado
como
a Jacob el premio prometido
de
su Raquel servida cuanto amada
la
Zagala impaciente enamorada
en
vez de risa y canto
todo
es gemido y llanto
hasta
ver su Corona deseada,
y
dejando correr ojos y brazos
pensando
que le enlaza
el
aire abraza, y acumula abrazos.
La
hermosa Sunamitide morena
espejo
de Salem y de sus damas,
que
engrandece a sus Reinas a porfía
la
que en cabañas habitó de ramas
ahora
de escogidas flores llena
a
vistas sale (y a su vista el día)
de
gloria coronada de alegría
por
la dorada puerta
para
su gloria abierta
sube
el tálamo eterno, el curso guía
a donde el Rey su esposo la recibe
en
matrimonio santo,
y
de su gloria manto le apercibe.
Teresa
al fin paloma, tierna esposa,
amiga,
amante, soberana,
querida
del pastor Rey de los Cielos
libre
del pecho y condición humana
en
vida eterna, y tálamo gozosa
mira
del móvil en quietud los vuelos
de
estrellas, luna y sol hace escabeles
para
sus pies desnudos,
y
los sayales rudos
bordados
ya sobre color de cielos
en
trono de zafiros y esmeraldas
gloriosa,
eternamente
Dios
la ciñe su frente de guirnaldas.
Canción
llena de amor, si puerto tomas
donde
amor no se trata
lengua
y estilo ata,
que
son griegos allí de amor idiomas,
y
cual Teresa enamorada y fuerte
ama
constantemente,
pues
es valiente amor hasta en la muerte.
Décimas de Alonso Palomino
a Santa Teresa
Temor
Cuando
el Paracleto Santo
fuego
del pecho divino
abre
en el alma camino;
le
da el temor sacrosanto.
Este
le defiende tanto
de
pecados y ocasiones,
que
en fáciles afecciones
antes
morir apetece
como
en Teresa parece,
con
tal temor, y su dones.
Ciencia
En
este sosiego el alma
conoce
por experiencia
el
santo don de la ciencia
que
le promete la palma
y
en su confusión, y calma,
cuando
está más afligida
su
inspiración la convida
a
la virtud y al camino
de
perfección peregrino
como
a Teresa en su vida.
Piedad
De
este Santo y justo miedo
el
alma tanto se ablanda
que
en ella cual cera blanda
escribe
Dios con su dedo
a
sus impresiones ledo
vive
el espíritu humano
para
con Dios y su hermano
con
tal piedad y ternura
como
se ve en la blandura
de
Teresa y trato llano.
Fortaleza
Con
esta luz soberana
la
confirma en fortaleza
con
que a descansar empieza
a
morir de buena gana,
la
Cruz le parece llana,
el
padecer es su empleo,
el
martirio es su trofeo
y
morir por Dios profesa
como
la Santa Teresa,
que
fue mártir del deseo.
Consejo
Quinto
don es el consejo
luz
que en el alma derrama
a
cuya luciente llama
se
mira como en espejo
son
su lucido reflejo
aún
cuando Dios se le esconde
ve
cuando, cómo y por donde
otra
vez ha de buscarle
y
sabe tomarle y darle
y
cual Teresa responde.
Sabiduría y entendimiento
El
saber y el entender
ricos
dones soberanos,
son
dos humildes hermanos
que
a Dios se acercan a ver,
con
ellos llega a saber
el
alma las cosas raras,
que
las Enigmas amaras,
menos
rayos se las cubren,
como
en Teresa descubren
sus
revelaciones claras.
[1] MADROÑAL DURÁN, Abraham: Alonso Palomino y Juan Ruiz de Santa María,
dos poetas toledanos del tiempo de Lope de Vega (con un vejamen inédito).
Toletum, 35. (Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo.
Toledo, 1998). Págs. de 153 a 187.
[2] LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Alonso Palomino, biografía de un poeta
eulaliense. (Santa Olalla, 2020). https://eulaliense.blogspot.com/2020/09/alonso-palomino-biografia-de-un-poeta.html
[3] SAN JOSE, Fray Diego de: Compendio de las solemnes fiestas que en
toda España se hicieron en la Beatificación de N.M.S. Teresa de Jesús fundadora
de la Reformación de Descalzos y Descalzas de N.S. del Carmen, en prosa y
verso. (Imprenta de la Viuda de Alonso Martín. Madrid, 1615).
[4] MOYA GARCÍA, María: Análisis de la beatificación de Teresa de
Jesús a través del «Compendio» de Diego de San José. ¿Relación de fiestas o
propaganda religiosa? Hipogrifo, Revista de literatura y cultura del Siglo
de Oro. (Instituto de Estudios Auriseculares. Universidad de Granada. Granada,
2021). Vol. 9, núm. 1, pp. 241-251.
El
anuncio de la beatificación de Teresa de Jesús trajo consigo la organización de
diversos festejos por todos los rincones de España. El Compendio de las
solemnes fiestas que en toda España se hicieron en la beatificación de N. B. M.
Teresa de Jesús, de Diego de San José, constituye un testimonio excepcional del
fervor con el que el pueblo español celebró la noticia. En este artículo,
trataremos de demostrar cómo el Compendio fue concebido como una obra que
pretende ir más allá de mera relación de fiestas, de manera que, gracias a la
inclusión de una serie de relatos sobre los milagros y prodigios que tuvieron
lugar durante las fiestas, el padre carmelita construye un espacio literario
propagandístico que busca claramente ofrecer una imagen de Teresa de Jesús
cercana a la santidad, preparando así el camino a su futura canonización.
[5] ROBLES, Eugenio: Compendio de la vida y hazañas del Cardenal don fray Francisco Ximenéz
de Cisneros y del Oficio y Misa Mozárabe. (Impresor Pedro Rodríguez.
Toledo, 1604).
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