A veces, cuando creemos que todo está dicho
sobre un tema, aparece una pieza que nos sorprende y nos abre nuevas preguntas.
Eso es lo que me ha sucedido al descubrir un azulejo de cerámica de Talavera
que, hasta donde sabemos, es el más antiguo con la representación de la Virgen
de la Piedad, patrona de Santa Olalla.
Esta pequeña joya, de 20 por 20 centímetros,
está esmaltada en blanco estannífero con decoración monocroma en negro
manganeso. Una delicada greca de sencillos roleos enmarca la escena, mientras
en la base descansa la peana del trono de la Virgen. El trono, el arco de rayos
y la propia imagen están trazados con sencillez, casi con un aire infantil que,
lejos de restarle valor, le otorga un encanto especial.
Un detalle particularmente curioso es un
sudario que cubre el cuerpo de Cristo, un elemento que no aparece en ninguna
otra representación conocida de la imagen de Santa Olalla, lo que convierte a
esta pieza en un testimonio único.
En el centro de la peana se puede leer la
inscripción: «Ntra. Sra. de la Piedad – Año de 1892».
Según me consta esta pieza no es única y
existen varias versiones casi idénticas.
Por su fecha y estilo, todo apunta a que fue
elaborado en la Fábrica de La Menora[1], un
histórico taller alfarero de Talavera que tomó su nombre del apodo de su
propietaria, Romualda Martínez, y que funcionó entre 1852 y 1905, primero bajo
su dirección y la de su marido, y más tarde en manos de sus herederos.
Hoy, más de 130 años después, este azulejo no
solo nos muestra una imagen devocional, sino que también nos conecta con la
tradición alfarera de Talavera y con una forma de representar la fe que, en su
sencillez, guarda todo el valor de lo auténtico.
[1] ATempora - Talavera de la Reina; Seis mil años de cerámica en Castilla-La
Mancha. (Fundación Impulsa Castilla-La Mancha. Toledo, 2018).