viernes, 26 de julio de 2019

Santa Olalla en el “Viaje a Extremadura” de Campomanes - Crónica de un político reformista ilustrado en 1778

Pedro Rodríguez de Campomanes
“Con motivo de mi viaje a Extremadura a negocios propios, juzgue ser mi obligación examinar los que al mismo tiempo encontrase digno de noticia del Consejo, cuyos desvelos están siempre fijos en promover la utilidad pública y el servicio de Su Majestad. - Uno de los principales objetos del Gobierno es facilitar los tránsitos y comunicaciones de las gentes. - Con la amistad y buena correspondencia que el Rey Nuestro Señor acaba de establecer con el tratado de 11 de marzo de este año con la corte de Lisboa, es regular se haga común el tránsito de Madrid a Badajoz y es otra causa que obliga a mejorar en todo lo preciso aquel transito”.


Con esta disertación presentaba el político reformista ilustrado, que había sido Ministro de Hacienda con Floridablanca y en ese momento era presidente del Consejo de la Mesta, don Pedro Rodríguez de Campomanes y Pérez, primer conde de Campomanes, (Santa Eulalia de Sorribas (Asturias), 1723 - Madrid, 1802) su crónica del “Viaje a Extremadura”[1] fechada en Madrid el 4 de mayo de 1778.[2]
Campomanes divide su viaje en cuatro etapas a las que llama trozos. En el primer trozo, que va desde Madrid a la venta y puente del rio Alberche, aparece Santa Olalla, con cierto detalle, como una de las opciones del recorrido.
Transcribimos a continuación el texto alusivo a nuestro pueblo.
No considero necesidad de obra alguna en este trecho: el terreno es ya firme y se encuentran guijo y rollos para reparar con facilidad cualquier quiebra que pueda padecer el camino en lo sucesivo, el cual va por un valle suave y llano hasta dar con el lugar de Novés, que de ninguna parte se descubre hasta tropezar con las mismas casas, por estar situado en una hondonada, y con todo no hace en esta parte ninguna de sus avenidas.
A la salida se dividen dos caminos para ir al puente del Alberche.
El de la derecha se encamina a Santa Olalla, acompañado de grandes olivares; la primera legua es de tierra muy fuerte y negra, que en tiempo de aguas esta algo anegada, como la legua negra de Madrid a Getafe. Necesitaría alomarse con guijo, que es fácil de traer en carros de Santa Olalla o de Novés.
La otra legua hasta llegar a Santa Olalla necesita menos precaución; porque la tierra es más fuerte y va siempre entre olivares y tierra bien cultivada. […]
Santa Olalla es cabeza del condado de este nombre, que hoy se haya incorporado a la casa del Conde de Orgaz, y a la izquierda tiene muchos lugares, todos de excelente suelo y del mejor cultivo.
De Santa Olalla al Bravo hay dos leguas de muy buen piso y el camino necesita algunas alcantarillas para dar salida a las aguas: el suelo es bastante firme y se encuentran rollos para macizarlo y alomarlo en las pocas partes que lo necesite, cuyos puntos deberá determinar el perito que le reconozca. […]
Cartografía de 1772
Biblioteca de la Real Academia de la Historia
Por el camino de la izquierda que sale de Novés se va a Cebolla y se encuentran los lugares de Caudilla, Val de Santo Domingo, Alcabón, Carriches y Erustes, distantes uno de otro como una legua, y pertenece su jurisdicción al condado de Santa Olalla, aunque son villas eximidas, como lo demuestran los rollos que tienen a la entrada en señal de jurisdicción.
Su suelo es fertilísimo y bien cultivado, con olivares y encinares muy cuidados; pero como la tierra es de barro, aunque el camino sea bueno, necesitaría algún guijo o rollo y de alcantarillas sobre los arroyos que hay a las salidas de estos lugares, para que el transito fuese en todos los tiempos fácil. […]
La biblioteca de la Real Academia de la Historia conserva un plano de 1772, seis años anterior, que también contiene buena parte de este itinerario.[3]



[1] RODRÍGUEZ DE CAMPOMANES Y PÉREZ, Pedro: Viaje a Extremadura con Pedro Rodríguez de Campomanes, (Ediciones Caja de Extremadura. Plasencia, 2011).
[2] Biblioteca de la Real Academia de la Historia: Censura de los viajes que en 1778 y 1779 realizó el Sr. conde de Campomanes [Manuscrito]. (Madrid, 1778). 1 M-RAH, 11/8027 (33) - Colección Censuras, Legajo 15, n. 33.
[3] Biblioteca de la Real Academia de la Historia: Rotero del Viage [Material cartográfico]; que hicieron en la primavera del año de 1772 don Joseph Andrés Cornide, vecino de la ciudad de la Coruña y don Josef Martínez Moreno, abad de Sabuguido. (1772). RAH. 9-3900-2.

lunes, 22 de julio de 2019

Santa Olalla en un itinerario militar de Madrid a Talavera - Itinerario topográfico y estadístico de 1849

Recogemos la descripción y los planos que nos aporta sobre Santa Olalla el “Itinerario topográfico y estadístico de Madrid a Talavera de la Reina”,[1] en un manuscrito elaborado por el comandante de caballería y capitán del cuerpo del estado mayor del ejército don Mariano de Ahumada y Tortosa, fechado en Madrid en enero de 1849.
Este itinerario militar comprende la parte suroccidental de la provincia de Madrid y la noroccidental de la de Toledo pasando por las poblaciones de Alcorcón, Villaviciosa, Móstoles, Navalcarnero, Valmojado, Santa Cruz del Retamar, Quismondo, Maqueda, Santa Olalla, El Bravo y Cazalegas. La cartografía tiene una escala de 1:120.000 y está iluminada en varios colores, aparece trazada una retícula que equivale a un cuarto de legua por cada cuadrado.
La primera página contiene un cuadro con las jornadas en las que está dividido este itinerario: Primera jornada de Madrid a Móstoles; Segunda jornada de Móstoles a Valmojado; Tercera jornada de Valmojado a Santa Cruz de Retamar; Cuarta jornada de Santa Cruz de Retamar a Santa Olalla; Y quinta jornada de Santa Olalla a Talavera de la Reina. Santa Olalla es por lo tanto una parada o “punto de etapa” de este itinerario.





De cada una de las localidades que jalonan el itinerario hace una relación explicativa sobre su situación, casas, edificios notables, número de vecinos, oficios, producción y capacidad de alojamiento. Recogemos a continuación la que hace de Santa Olalla.
Santa Olalla – Es villa perteneciente a la comandancia militar de Toledo, al partido judicial de Escalona y punto de etapa. Su población se compone de 254 casas, 5 posadas regulares, 2 iglesias y 1 casa de beneficencia. Hay una fuente pública intramuros, 50 pozos de agua potable, 2 tahonas y un molino de agua a media legua de distancia.
Su situación es en terreno de buena calidad que produce al año: 14.000 fanegas de trigo, 6.000 de cebada, 15.000 arrobas de aceite, 12.000 de vino y 1.000 de garbanzos.
Tiene 23 caballos de silla, 224 mulas de labor, 50 de carga, 60 caballerías menores, 64 carros de mulas y 13 para bueyes. 120 cabezas de ganado vacuno, 9.000 de lanar y algunas de cerdos.
El número total de vecinos asciende a 280 y son: 1 oficial retirado, 2 empleados, 20 propietarios, 182 jornaleros, 21 labradores, 4 comerciantes, 8 trajineros, 3 sastres, 1 zapatero, 5 carpinteros, 4 albañiles, 3 herreros, 3 panaderos, 4 carreteros, 1 medico, 1 cirujano, 3 albéitares, 2 boticarios, 1 abogado, 1 escribano y 4 eclesiásticos.
Su contribución anual asciende a 83.200 reales, y le corresponden 2 mozos para el servicio del ejército en quinta de 25.000 hombres.
Puede mantener alojados con comodidad 600 infantes y 400 caballos.



[1] Archivo Cartográfico de Estudios Geográficos del Centro Geográfico del Ejército: Ytinerario topográfico y estadístico de Madrid á Talavera de la Reyna. (Madrid, 1849). Colección: PCGE — Ubicación: AR — Signatura: Ar.M-T.2-C.9-165 — Código de barras: 2204339

martes, 16 de julio de 2019

Romance de Barreñones

En el mil doscientos doce
hasta Andalucía marchaban
los reyes, los capitanes
que España reconquistaban.

Rey de Castilla y León,
Rey de tierras Navarras
y junto al rey de Aragón
contra los reinos de taifas.

Mencía Lope de Haro
Señora de Santa Olalla,
busca consuelo en la Cruz
por su hermano que allí estaba.

Aquel dieciséis de julio
aquel capitán don Diego,
aquel triunfo en batalla
otra gesta del medievo.

Llegó don Diego a estas tierras
y su hermana lo esperaba,
la buena-nueva recibe
y comparten la esperanza.

Y en estas tierras quisieron
fuera fiesta señalada
aquel dieciséis de julio
en que la Cruz triunfara.

Que se celebre en Otero,
en la Mata y en Erustes
Domingo Pérez, Carriches
toda esta tierra de ilustres.

Fueron corriendo los siglos
la fiesta casi olvidada,
ya que solo en Santa Olalla
la fiesta fue conservada.

Y de aquella nueva América
hecho por indios, con cañas,
hasta este pueblo llegó
un Cristo de tierra extraña.

Cristo de la Caridad
nuestro moreno patrón,
fiel historia y tradición
buen consuelo y devoción.

Con el calor de Toledo
Barreñones encendemos,
en esta noche de víspera
tradición que mantenemos.


Foto: Jesús Sánchez de Haro (2019)


- LÓPEZ MUÑOZ, Josué: Romance de Barreñones. Programa de las Fiestas de Verano de Santa Olalla en honor del Stmo. Cristo de la Caridad. (Ayuntamiento de Santa Olalla y Hermandad del Stmo. Cristo de la Caridad. Santa Olalla, julio de 2019).

miércoles, 10 de julio de 2019

Luis Cosón y la cúpula del Cristo de la Caridad - "La Capilla Sixtina de Santa Olalla"

El mayor mérito artístico de la capilla del Cristo de la Caridad en la iglesia de San Julián de Santa Olalla está en su cúpula decorada con pinturas al temple de gran belleza. Las pinturas se realizaron entre 1726 y 1736 por el maestro pintor de origen flamenco Luis Cosón, afincado por aquellos años en la toledana villa de Cebolla. Son de estilo barroco-rococó con la influencia del prolífico pintor Lucas Jordán.[1]
El Libro 3º de la Cofradía de la Santa Caridad recoge una nota de 1726 en la que el visitador Juan Cordón hace donación de 500 reales de vellón de los que se hace cargo el mayordomo Joseph López Escalona para que “se pinte de ‘Jordán’ la capilla del Cristo”.[2] En diciembre de 1736 las pinturas debían estar ya concluidas pues Joseph López Escalona entregó la cantidad de 500 reales de vellón a Luis Cosón por pintar la capilla; este pago aparece firmado por el cura de San Julián, Juan Guerrero Luna.


Pese a lo que pueda parecer no son frescos, sino pinturas al temple aplicadas sobre el yeso muerto. Esta técnica facilitaba la labor de los artistas, que simplemente decoraban la arquitectura ya terminada, sin tener que aplicar el mortero de yeso. [3]
El conjunto mural representa un cielo lleno de Ángeles que sostienen elementos de la pasión de Cristo, son los conocidos como Ángeles Pasionarios. En las cuatro pechinas aparecen los bustos de los cuatro evangelistas: Mateo, Marcos, Lucas y Juan; con sus respectivos símbolos: el ángel, el león, el buey y el águila. En los arcos decoración floral y rocalla, el del frente encierra el retablo, los de los lados enmarcan las dos ventanas y en el trasero aparece pintada una ventana con vidriera, aunque este trampantojo parece inacabado. Entre la decoración de los arcos flanqueando cada ventana, incluido el trampantojo, hay un angelote, su estado es casi inapreciable por los que solo podemos afirmar que uno de ellos sostiene la balanza símbolo de la justicia. Este motivo iconográfico nos hace pensar que portaban los atributos de las virtudes cardinales y teologales. La cúpula propiamente dicha se divide mediante listas de decoración floral, rocalla y lacería en ocho secciones, en cada una de las cuales hay un ángel de rostro femenino que sostiene un elemento de la Pasión de Cristo: la corona de espinas; el sudario y los tres clavos; la lanza de Longinos; la escalera; la Cruz; la toca de la Verónica con la Santa Faz; la columna y la soga; y la caña con la esponja.
No fue esta cúpula el único encargo que la Cofradía de la Santa Caridad hizo a Luis Cosón ya que, diez años más tarde, en 1746 le encarga cuatro pinturas para dos estandartes. Dos pinturas recogen su emblema cofrade, la Cruz verde con brotes, y diversas heráldicas; y las otras dos las imágenes de Santa Eulalia y San Julián.[4]
Actualmente varios historiadores, cronistas y académicos estamos trabajando en estudiar la figura de este pintor todavía desconocido y difundir su obra que se reparte por lugares como Gavilanes (Ávila), La Torre de Esteban Hambrán, Cebolla, Domingo Pérez, Carriches, Erustes, La Mata o La Puebla de Montalbán. Santa Olalla no debe quedar fuera de estos estudios ya que hemos recibido como legado, algunas de las mejores obras del pintor Luis Cosón.





[1] LÓPEZ MUÑOZ, JOSUÉ: Luis Cosón y la cúpula del Cristo. Programa de las Fiestas de Verano de Santa Olalla en honor del Stmo. Cristo de la Caridad. (Ayuntamiento de Santa Olalla y Hermandad del Stmo. Cristo de la Caridad. Santa Olalla, julio de 2019).
[2] Archivo Parroquial de Santa Olalla: Libro 3º de la Cofradía de la Santa Caridad. 70/APSO. (De 1692 a 1745).
[3] LÓPEZ MUÑOZ, JOSUÉ: Dieciséis de Julio: Orígenes, historia, leyenda, tradición y devoción del Santísimo Cristo de la Caridad de Santa Olalla, en el Octavo Centenario de la Fiesta del 16 de julio (1212–1598–2012). (Ediciones Andante. Santa Olalla, 2012). Pág. 48.
[4] LÓPEZ MUÑOZ, JOSUÉ: Dieciséis de Julio: Orígenes, historia, leyenda, tradición y devoción del Santísimo Cristo de la Caridad de Santa Olalla, en el Octavo Centenario de la Fiesta del 16 de julio (1212–1598–2012). (Ediciones Andante. Santa Olalla, 2012). Pág. 54.